“¿Estamos solos en el Universo? es una de las preguntas más excitantes e interesantes” señala el catedrático británico, quien anima al público a conocer el por qué del interés a esta pregunta.

El profesor y catedrático de Astrobiología en la Universidad de Edimburgo señala que el oxígeno y los rastros fósiles son algunas de las señales que abren la puerta a la posibilidad de la existencia de vida en un planeta. El uso de telescopios también resulta una buena herramienta para ello.


La existencia de vida en otros lugares que no son la Tierra es un tema controvertido en todo el mundo y ante afirmaciones en periódicos y páginas web de dudosa credibilidad, el catedrático señala la página web de la NASA y de la Agencia Espacial Europea (ESA) como los mejores lugares donde encontrar información fiable.

Lo mismo sucede con las películas. En los últimos años, han saltado hasta las grandes taquillas, títulos como ‘Gravity’ o ‘Interestellar’, con el foco de atención puesto en el espacio. El catedrático considera algunos de los filmes que tratan acerca del tema son “demasiado optimistas sobre la posibilidad de vida alienígena”. Y añade el doctor Cockell: “si encontramos vida alienígena es probable que sean como microbios, no Yoda (personaje ficticio de largometraje ‘La Guerra de las Galaxias’).”

De todas formas, concluye el astrobiólogo británico que “estas películas consiguen que la gente se interese por la ciencia y por ello tienen un efecto positivo.”

Ante la pregunta sobre quién considera un investigador de referencia en la posibilidad de vida en otros planetas, el doctor Cockell no duda en reconocer a Carl Sagan como “el mejor y más reconocido astrobiólogo y científico planetario.”