Justo hace ahora dos años, en BIOPARC Fuengirola se recibía con enorme ilusión el nacimiento de Djibril en la familia de chimpancé Occidental (Pan troglodytes verus). Su madre, Kika, fue capturada siendo un bebé en la selva y, tras ser rescatada por la Guardia Civil, encontró un nuevo hogar en el parque malagueño. Sin la posibilidad de haber aprendido a ser “madre” rechazó al recién nacido lo que, conscientes de su valiosa genética, motivó una importante operativa internacional para salvarlo. El Programa Europeo de Reproducción en Cautividad de Especies Amenazadas (EEP) en el que participa BIOPARC trabaja con dos objetivos fundamentales: máximo bienestar animal y preservar la especie. En este sentido, la vía de actuación era novedosa, arriesgada y compleja, pues se decidió buscar una madre adoptiva para que el pequeño creciese con sus congéneres. El “saber hacer” de los profesionales implicados y la vital aportación de la “inesperada” madre consiguieron una maravillosa historia con final feliz.
Djibril representa la “esperanza” para la salvación de su subespecie, pues su genética es valiosísima para el futuro del Programa de Preservación de los chimpancés occidentales, en peligro crítico de extinción.
Después de alimentarlo y cuidarlo en BIOPARC Fuengirola, cuando fue abandonado por su madre, Djibril se trasladó a BIOPARC Valencia en julio de 2019 donde los expertos veían las mejores posibilidades de encontrar a la imprescindible madre adoptiva. Tras un largo y complicadísimo proceso en el que cada individuo del grupo de chimpancés debía aceptar al pequeño y en el que cada paso era crítico, finalmente la “tía” Eva “adoptó” a Djibril. Hoy este precioso chimpancé cumple dos años completamente integrado en su nueva familia. Contemplarlo mientras juega incansable con su “hermano” Coco que en julio cumplirá tres años, es un motivo de inmensa alegría y satisfacción para el mundo conservacionista. Pero, sobre todo, es la oportunidad de que las personas podamos contemplar y emocionarnos ante esta belleza y sentir la necesidad de cambiar nuestra actitud hacia la preservación de la naturaleza.
La estrategia del equipo técnico permite el mantenimiento de las necesarias tomas de biberón prácticamente sin contacto con el chimpancé “adoptado”.
Por su carácter, Djibril tiene un estatus bastante alto en el grupo y tanto es así que sorprende incluso a sus cuidadores. Aprende y disfruta de una buena relación con los adultos, el macho Moreno y las otras hembras Malin, Py, Natalia y Noelia, la madre de Coco. Su madre adoptiva, Eva, sigue teniendo un papel fundamental en su crecimiento, y siempre da facilidades a los cuidadores para que realicen los cuidados imprescindibles que requiere el pequeño. Como el destete de los chimpancés se produce entre los dos años y medio y los cinco años, era todo un reto continuar con esta necesaria alimentación. Ahora podemos decir que uno de los éxitos ha sido poder mantener las tomas de biberones, con la estrategia definida por el equipo técnico de reducirlas progresivamente hasta que en pocos meses su alimentación sea completamente a base de sólidos. Por su bienestar debía crecer entre sus congéneres, por lo que el objetivo desde el inicio fue integrarlo en el grupo y hacerlo independiente de los seres humanos.
La carga genética Djibril, que en el futuro será un macho reproductor, es una auténtica esperanza para su subespecie. Esa salvaguarda de las especies amenazas es el objetivo de la conservación ex situ y, en el caso de los chimpancés “verus”, los dos BIOPARC son centros de referencia. El compromiso con la preservación de la naturaleza y las especies en peligro de extinción implica ineludiblemente trabajar en la conservación in situ. En el caso de esta subespecie de chimpancés desde la Fundación BIOPARC se colabora con el Proyecto Nandoumary del Instituto Jane Goodall en Senegal para recuperar y conservar su hábitat natural. La unión de fuerzas conservacionistas da nuevas esperanzas al futuro de los chimpancés occidentales y el bebé Djibril es un claro ejemplo de la importancia de los dos pilares en los que hoy en día se basa la Conservación.
El parque ha preparado un divertido y didáctico Cuento virtual interactivo para acercar a los más pequeños su historia y la importancia de la conservación.
Para BIOPARC es fundamental la educación medioambiental de los más jóvenes, pues son grandes prescriptores para motivar cambios en la actualidad y representan el futuro de un planeta que debe ser el hogar de todos los seres vivos que lo habitamos. Con este objetivo, ha preparado un Cuento virtual entretenido y de contenido educativo, que narra la historia de Djibril. Al tratarse de un recurso on line totalmente gratuito, las familias que lo deseen pueden disfrutarlo con los más pequeños e interactuar para descubrir interesante información sobre los chimpancés.